El pasado 17 de enero de 2021, tuvimos la bendición de las mascotas con motivo de la festividad de san Antonio Abad, patrono de los animales.
Esta bendición nos debe llevar a contemplar, admirar y dar gracias a Dios por su obra maravillosa; porque son criaturas de Dios, también fueron creadas por Dios. El Señor derrama sobre ellas sus beneficios, como lo hace con todo ser viviente, porque comparten la vida del hombre con todas sus vicisitudes.
En la Sagrada Escritura vemos como Dios se vale de la ayuda de los animales o de su figura para insinuar en cierto modo los dones de la salvación:
– Los animales fueron salvados en el arca de las aguas del diluvio y después del diluvio, quedaron asociados al pacto establecido con Noé
– El cordero pascual recordaba el sacrificio pascual y la liberación de la esclavitud de Egipto
– Un gran pez salvaguardó a Jonás
– Unos cuervos alimentaron al profeta Elías
Por ello al invocar la bendición sobre las mascotas alabamos a Dios, le damos gracias por habernos elevado por encima de las demás criaturas y le pedimos que, conscientes de nuestra dignidad, vivamos siempre al amparo de su ley.
(Del Bendicional)
Se realiza en el día de la festividad de san Antonio Abad. Este santo vivió en el s. IV. Fue el iniciador de los monjes que estableciéndose en el desierto, en soledad y silencio, buscaban a Dios en plenitud. La iconografía cristiana lo ha representado en compañía de animales en el desierto porque era la única compañía que tenía. De ahí que se le haya invocado como patrono de los animales.